Aunque afuera llueva y nosotros ya no estemos
aunque llueva a cántaros y ni nos busquemos
entre los cántaros rotos
como mis sueños
perdidos en un rincón
de viejos sabios
bebiendo.
No se perderá tu mirada de mis recuerdos
aunque tus ojos desaparezcan
y no quede de nosotros
algo distinto a la nada
y no sean ya
más que cenizas, más que viento
se quedará tu mirada unida a esos momentos
en que miro al sol
[y este desaparece
Sin un orden consecuente
como el de tu mirar
unas veces perdido
otras nefasto
y hasta enamorado
sin tiempo
sin sonrisa
sin cuerpo
No seremos más que gotas
que se rompen al chocar.
como tu mirada clavada
en los eventos
que suelo soñar.
muriendo de dolor
de ojos desapareciendo
entre los viejos sabios
que continúan bebiendo.